Una mente sin cuerpo .
miércoles, 12 de agosto de 2015
miércoles, 5 de agosto de 2015
SOLEDAD del 6to día
sábado, 6 de septiembre de 2014
TREN
lunes, 25 de agosto de 2014
somos p ue st o s a p r ue ba antes de poder defendernos,
lloramos y reimos antes de poder hablar
y somos testigos del sufrir del mundo antes de poder acordarnos de que lo fuimos.
Crecemos conscientes de la miseria de la tierra, acostumbrados a la violencia, al dolor.
Sin embargo, siempre nos inclinamos hacia el amor, el cariño, el respeto y la amistad.
Antes de nacer, sabemos lo que queremos,
y cuando llega la memoria a nuestras vidas,
ya sabemos...
que NO vamos a parar
hasta cambiar el mundo.
lunes, 10 de diciembre de 2012
un tobogán y la soledad
viernes, 20 de abril de 2012
16 años
¿Como hacer para tener 16 años? ¿Como hacer para tener 16 años si no queres tenerlos? Todo lo bueno siempre puede ser mejor, y todo lo malo siempre ocurre por el mismo motivo: tengo 16. Se repite una y otra vez, falsa ilusión de fuga. Y no es mi propósito ser deprimente, deprimir ni ser deprimida pero es que no entiendo y no encuentro forma alguna de ser 16.. si cada célula del cuerpo, si cada neurona pide a gritos mas libertad y pide a gritos, a su vez, a una mama que me haga la comida, un papa que me arrope y dos hermanos que me jueguen al volver a casa... asustada, con el rabo entre las piernas, del mundo, de la gente, de la calle y del inmenso espacio que queda entre mi cueva, mi cama y mi persona.
Me quejo, exijo, tengo centenares de caprichos que algunos no son, doy mil explicaciones con fundamento.. solo que suelo olvidarme el mas importante, y no necesariamente el mas importante para mi: tengo 16 años, soy chiquita, NO entiendo, tengo que crecer mas, falta mucho, falta poco, les da impresión.
NO! NO! No tengo 16 años, no tengo, no tengo 16, 16, 16.. no los tengo pero los tengo. ¿Como hacer para tener 16 años si en realidad no los tengo? ¿Hace cuanto que piso, y me acuesto en esta tierra? 16 años, 6 meses, 10 días, 4 horas, 5 minutos... ay Juliana! ¿y te crees grande? SI! Si, me creo grande, no se si lo soy o no pero eso siento yo y cuanta menos libertad me den, mas grande soy yo. A veces no entiendo si estoy creciendo o rejuveneciendo, o si estoy envejeciendo. Cuando me dan de probar un poco de aquellas alas, me las arrebatan, no las quiero devolver.. POR FAVOR NO MAMÁ, POR FAVOR NO PAPÁ NO ME LAS SAQUES.. las aprendí a querer.. no seas cruel. Como hago para estar feliz en el momento de la devolución? Me dejan en esta jaula imaginaria y psicológica encerrada (o no tanto, con la puerta entreabierta para poder respirar) con la incertidumbre.. ¿cuando me darán las alas para salir a volar? Cuando me las puedo quedar para siempre? ¿Es necesario esperar a alcanzar la mayoría de tiempo existido sobre o en la tierra? ¿Falta mas, falta menos? "No quemes etapas hija," dicen.. ¿Que etapas mierda? ¿Que etapas decís? No las encuentro.
domingo, 11 de marzo de 2012
olor a tierra mojada
viernes, 13 de enero de 2012
un domingo que me miro de soslayo
sábado, 7 de enero de 2012
noche estrellada.
Somos tan insignificantes. Tan chiquititos. Tan ajenos. Soy solo una persona mas en todo el mundo, un ser mas en todo el universo. Podría jamas haber existido, y sin embargo aca estoy y soy conciente de eso.Nacemos, y nadie nos pregunta si queremos, nos imponen ante el mundo, un mundo lleno de objetos no naturales, un mundo desvirginizado, un mundo corroido, corrompido, sucio, usado... maltratado. Y cuando sos bebe, todos te sacan ventaja, menos en la pureza. Perdes tu inocencia, a medida que te internas en las idas y vueltas de la vida que te imponen los de afuera. No tenes independencia.. pero cuando la tenes, ya tomaron el rumbo de tu vida por vos, ya eligieron por vos, ya te condenaron a seguir danto vueltas y mas vueltas, y caerte mareado ante los pies de la sociedad, de la necesidad que crean ellos mismos, de su enfermedad. No estamos viviendo nuestra propia vida, por mas que sean tus propias decisiones. Nuestro destino lo crea la historia de la humanidad, nuestro "Dios" son los rugientes deseos de poder ser felices.. y cuanto mas nos internamos en esa necesidad, mas nos alejamos de ser libres e independientes. Nunca vamos a poder separarnos por completo de esta carne, de estas paredes que nos controlan. Nunca vas a poder ser vos mismo, porque te controlan las demas personas, y si no te controla eso, te autocontrolas, porque para eso te criaron. Para no romper cosas, para no subirte en zapatillas a la cama, para levantar la mesa, para saludar adecuadamente, para contestar bien a los padres, a someterte, a dar la razon y a "cambiar la cara".
martes, 27 de diciembre de 2011
relato fantástico
A veces siento que el viento me trae presagios, muchas veces el gris del día junto con el frío confunden la sensación, sin embargo aquel día era evidente que algo estaba ocurriendo.
Como cada mañana de lunes a viernes, la luz todavía no presente pero si perceptible lleno los recovecos de mi habitación y de mi mente consiente, aunque algo diferente podía sentirse en el aire estancado. Mi mirada recaída en el espejo reflejaba la pereza de mis actos, y lo lentos que actuaban sobre mí los estímulos exteriores, casi parecía un árbol anciano. Pero como habría de saber yo en ese entonces que la fragilidad de mis pensamientos enfrascados y retraídos, habrían de cobrar algo más que forma.
El auto estaba más frío que de costumbre, y las vueltas que daba mi madre en cada esquina me mareaban, ya no sabía por dónde íbamos así que solo me limite a mirar hacia fuera, fue entonces cuando lo vi. Sus brazos se elevaban de forma majestuosa sobre el cielo, imperando sabidurías, ofreciendo paz, o de eso daba la sensación. Mas debo aclarar que lo más sorprendente de aquel ser, era su cuerpo riguroso y tallado, todavía no logro comprender si fue mi estado anormal que deliraba o fue la exagerada claridad de mi mente que pudo distinguir por primera vez en todos los años transcurridos en aquel colegio, las formas…las formas que tenia la corteza. Formas abstractas accidentalmente ubicadas de tal manera que con una gran imaginación y una mente muy abierta de podían observar figuras, figuras humanas.
Mire perturbada devuelta dentro del auto, y aunque todo transcurría con calmada y monótona tranquilidad, algo había cambiado para mi ese día, estaba totalmente desconcertada. Y fue de esa manera que entre a clases.
Los profesores pasaron aquella mañana de forma muy parecida a las anteriores, aunque al mismo momento todo parecía una pesadilla. La profesora de biología no hizo más hablar toda la clase, algo muy recurrido en su técnica de enseñanza, lo inaudito fue el tema que nació del comentario que ella incremento al monologo de los cuerpos humanos, haciendo honor a las antiguas religiones y conocimientos sobre la medicina, entre ellas la mitología celta, y escarbando mucho más uno de mis compañeros de aula aporto su conocimiento sobre dríades, tal vez era el destino que la bocanada de aire que tome al salir al recreo representara tantos presagios que no pudo caberme duda de que algo muy singular estaba ocurriendo. Fue en la clase de geografía que surgió de lo más recóndito de mi alma, un miedo tan espeluznante que cuando mas intentaba apaciguarlo más crecía. Alicia, la profesora, tenía un nombre muy peculiar, su nombre traía a mi mente a la Alicia de mi infancia, En el País de las maravillas, adecuado y acertado pues lo que sucedió después de esa clase jamás podría confundirse con la realidad o la credibilidad de los hechos, y de haber sido posible me habría auto excusado alentándome a creer que todo había sido no mas que ese terrible sueño comenzado una vez despierta. Así es como me entere de la historia del jardinero, aquel jardinero tan antiguo que había plantado unos 168 años atrás, aquel árbol que de una manera casi imposible había llegado desde su ubicación en la esquina opuesta al establecimiento hasta la última clase, del último salón, de la ultima escuela del vecindario. Este hombre, nacido y crecido dentro de la escuela, era un pobre jardinero aficionado a los árboles, para la época en que vivía sus extrañas investigaciones, eran consideradas algo peligroso. Los alumnos del colegio lo debían mirar con evidente rechazo, y hasta se afirmo que un grupo de jóvenes del último año lo vieron practicar brujería, desgraciados esos alumnos que garantizaron le expulsión del colegio, hasta ese entonces su hogar. Día a día, simplemente se limitaba a permanecer a los alrededores de su antigua casa, pero en las noches su humilde e inocente cara se tornaba afilada y aguda, sus movimientos demasiado ágiles y su mente adquirían el color de la locura. Y fue de esa locura que el hombre muy angustiado, planto el árbol que hoy en día vemos, sin embargo vacío de mente y alma se marcho lejos para no volver y solo pocos vecinos lo volvieron a ver caminando siempre hacia el sur. La historia había dejado en todos los demás presentes, una idea y tal vez un motivo de burla y carcajadas, pero yo no podía ver nada gracioso en lo relatado, los matices de los cuestionamientos habían aflorado en mí, y cuando salí del colegio, fui directo al árbol.